El acero tradicional ha sido durante mucho tiempo la base de la construcción, pero conlleva retos invisibles: corrosión con el paso del tiempo, peso elevado, costes de mantenimiento continuos y altos costes logísticos. Estas limitaciones dan lugar a obras más caras y menos duraderas.
La varilla de material compuesto es la alternativa innovadora que elimina estos problemas. Más ligera, inmune a la corrosión y con una durabilidad superior, te permite reducir costes y aumentar la eficacia de tus proyectos.